La víctima era un repartidor de comidas rápidas y fue asesinado anoche por un familiar luego de una discusión en medio de la calle.
Walter Ruggiero asesinó de una puñalada a su cuñado, Marcos Britos, por una disputa que hasta el momento no se pudo esclarecer.
Los dos hombres se encontraban en la vereda de la casa de Britos cuando comenzaron a discutir por razones desconocidas y Ruggiero extrajo un cuchillo de su mochila y le asestó reiteradas puñaladas. Minutos más tarde, los vecinos encontraron el cuerpo sin vida de la víctima y aseguraron que tenía sangre en el rostro y otras partes del cuerpo.
La policía fue alertada por la situación y se dirigeron al domicilio donde sucedió el hecho y pudieron constatar que, previamente, Marcos se habría encontrado con su agresor, por lo que se ordenó un allanamiento en la casa del homicida y se halló dentro de una mochila escondida en la parrilla de la vivienda el arma blanca utilizada en el crimen con manchas hemáticas, por lo que se concretó la detención del principal sospechoso.