El ministro de Seguridad de la Nación, hizo referencia al asesinato del kiosquero Roberto Sabo y a los reclamos de mayor seguridad que sostienen los vecinos y vecinas de Ramos Mejía.
“Es un momento muy triste y muy doloroso. Venimos trabajando con La Matanza hace más de 20 días, un mes, y venimos haciendo un trabajo lo más prolijo posible en cuanto a la utilización de los recursos humanos con los que contamos. Ante esta desgracia uno solo se puede solidarizar con los padres”, aseguró esta mañana Aníbal Fernández, en contacto con los medios.
Respecto a la situación puntual del partido de La Matanza, el titular de la cartera de seguridad dijo que se está “analizando punto por punto la mejor forma de estar presentes. Las fuerzas están y ayer envié 500 efectivos más”, aunque añadió que al tener un millón y medio de habitantes, pretender que haya un agente en cada cuadra del distrito “es impensable”. “Estamos buscando la mejor forma de administrar los recursos”, aclaró.
Consultado sobre los registros delictivos, Fernández aseguró que “cuando uno está revisando estas cosas, las estadísticas son nada. Estamos hablando de una vida humana truncada por nada. Entonces no se pueden explicar muchas cosas cuando estamos trabajando en algo tan delicado, tan cuidadoso y sin solución”, manifestó.
Acerca de los episodios con gases lacrimógenos registrados ayer por parte de la Policía Bonaerense, expresó: “Yo nunca voy a estar del lado de la represión. Estuve cinco año en la fuerza y me fui sin un muerto”.