El Gobierno nacional confirmó la apertura del negocio del pago del transporte público de pasajeros y anunció que el boleto se podrá pagar con cualquier tarjeta de crédito o débito y con el celular. Así lo informó el vocero presidencial, Manuel Adorni, pero aclaró que seguirá vigente la tarjeta SUBE como medio de pago.
Como bien se informó, el objetivo de la medida es quitarle la exclusividad de Nación Servicios y el sistema SUBE en la administración del pago del transporte público en todo el país. Esto les permitirá a los usuarios pagar el boleto de colectivo, tren o subte con cualquier tarjeta de débito o crédito.
«El Gobierno tomó la decisión de liberar el sistema de pagos en el transporte público», aseveró el portavoz desde Casa Rosada y remarcó que «la SUBE no va a dejar de existir». «Esto significa la federalización del sistema«, agregó Adorni.
Esta medida del Gobierno de Javier Milei implica derogar la Ley 84/2009, sancionada durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner -que creó el Sistema Único de Boleto Electrónico.
Para nosotros la SUBE sigue cumpliendo un rol clave para fiscalizar los servicios que prestan las empresas de colectivo y los gastos que realizan», insistió el funcionario al señalar que igualmente la SUBE se seguirá utilizando. «Simplificar un servicio que se creó hace 15 años y todavía seguía dependiendo de la carga en un kiosco o una estación de pago», argumentó sobre la medida.
Este cambio también significará el fin del «convenio marco» que otorgaba a Nación Servicios el control exclusivo de este sistema. Aunque la resolución aún no está cerrado, fuentes cercanas a su elaboración aseguraron que algunas decisiones clave ya fueron establecidas.
Por ejemplo, la llegada del sector privado implica un sistema abierto: los dispositivos instalados en colectivos y estaciones deberán aceptar todas las tarjetas, ya sean bancarias o de fintech, tanto de débito, crédito o prepagas, sin ninguna distinción, integrando nuevos medios de pago al sistema SUBE.
Un objetivo sería simplificar el proceso y reducir las filas en las estaciones y colectivos. Además, según se informó, no habrá exclusividad para marcas o bancos.
El Gobierno busca modernizar el sistema SUBE y romper exclusividad de Nación Servicios
El objetivo principal del Gobierno es modernizar el sistema SUBE, concebido en 2009 durante la «crisis de monedas». La propuesta contempla romper la exclusividad que actualmente ostenta Nación Servicios en la gestión del sistema, el cual cobra una comisión del 7%.
Así, lo que se pretende es permitir el uso de diversas tarjetas bancarias o de fintech para el pago del transporte público, tanto en estaciones de trenes como en colectivos, fomentando una competencia de mercado que evite la intervención estatal y «mejore» la experiencia del usuario.